Ahora que ya no estamos tan restringidos y apetece salir a pasear, buscando cosas bonitas para hacer con los peques me encontré con una iniciativa que me enamoró. Se trata de recoger piedras por la playa o el monte para pintarlas y devolverlas a la naturaleza para que alguien pueda encontrarlas.
¿A qué niño no le encanta recoger piedras y llevarlas para casa?
Yo recuerdo cuando mi hija era pequeña que ya no sabía dónde meter tanta piedra que llegaba a casa, por más que yo devolvía las piedras a su hábitat natural parecía que en mi casa se reproducían. Con la iniciativa Galicia- Piedras de colores, estas piedras que llegan diariamente a nuestra casa podemos aprovecharlas y convertirlas en un divertido juego artístico pintándolas en familia.
Cuando tenemos la piedra preparada para compartir y llevar a nuestro escondite secreto, le hacemos una foto la publicamos en el grupo de Facebook y las escondemos en un lugar concreto y le damos unas pistas a la gente para que sepan por dónde las vamos a depositar. Evidentemente es un juego para que participen niños por lo tanto tenemos que ponerlas en un sitio accesible para ellos y así también acostumbramos a los peques a desprenderse de sus pequeños tesoros para hacer felices a otros niños.
Las piedras pueden ser de cualquier tipo, se pintan o se escribe una frase bonita, con cualquier tipo de pintura o rotulador, siempre pensando que esa piedra va a hacer feliz a otro peque.
La idea del juego no es quedarnos las piedras sino compartirlas, además así vamos viendo como nuestras piedras van llegando a manos de otras familias que las encuentran y las vuelven a esconder.
¿ Cómo funciona?
Una vez que tenemos la piedra pintada hacemos un foto y la publicamos en este grupo de Facebook con el Hastag #GaliciaEscondida si la escondemos en Vigo, #GaliciaEncontrada cuando la encontramos o #GaliciaRebotada cuando la piedra que encontramos la volvemos a esconder.
Si os animáis podéis apuntaros en el grupo Galicia-Piedras de Colores, que acabamos de crear.